Donde acababa el infinito se encontraba el alma, una imagen del paraiso donde el tiempo no existía. En ellos se acababa el infinito. Ellos, sólo ellos, nadie más podía vivir bajo ese ficus. La mujer estiró el cuello ladeando la cabeza para que lo besara, lo lamiera y sí, lo mordiera. Deseaba ser mordida por él, solo por él. Que el la probase, que dejase derramar el rojo liquido por su garganta, darle así más poder, dejar que notase su virginidad en la sangre. Se aferró a su espalda acariciandola despacio hasta llegar a su cabello al cual se enredó lentamente. Elevó sus caderas para chocarlas contra las del vampiro, para notar su excitación.
-Solo volvamos al principio. Dejemos que los sueños nos guien. Huyamos de las raices, de las razas. Dejemos atras esos pensamientos, esas ideas que tenemos inculcados desde niños. Sólo dejemos que hablen las manos, que los cuerpos se unan en un instante. Dejemos que el viento nos susurre aquello que nuestras voces se niegan a admitir. Sólo... que sólo el silencio, el árbol, la noche y las estrellas sean nuestros confidentes.
Lejos de perder el norte, lejos de las formas oscuras que rodeaban el lugar. La lycan dejó libre su alma, libre, para besarle los labios con lentitud. Sensaciones de niña que la convierten de nuevo en una lobita, que la hacen estremecerse y la vuelven infantil. Son sus emociones, humo de visiones, nubes que reflejan el deseo de ambos cuerpos. Despacio comenzó a rozar su torso contra el de Vladis. Un nuevo viaje del alma, surcando un cuerpo para llegar al otro. Dandole todo, no solo el cuerpo, no solo el alma, no solo sus besos... todo eso era mucho más unido que separado.
trozo de novela...me gusta, incoherencias con sentido, nada más
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2 comentarios:
a mi tambien me ha gustado, y si no fuese lo suficientemente fuerte como para controlar mis instintos, acabaria diciendo algunas groserias sin sentido, alguno salvo sentido sexual, y no es cuestion.
Muy bonito ^^
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